jueves, 12 de abril de 2007

¿La cucharada?


Woody Allen vuelve a la carga en el cine, luego de “Match Point”, y nos trae Scoop, una mezcla de comedia romántica y drama en el que él mismo es protagonista y a la vez productor, y cuya traducción parece ser “Cucharada”, la cual no tiene sentido.
Encarnando a un ilusionista, Allen conoce en uno de sus shows a una periodista norteamericana de nombre Sondra Pranski (Scarlett Johansson) que pasa de visita por Londres. Sus vidas estarán luego muy conectadas por el mismo hecho y se entablará una tierna amistad.
Su vida da un giro de 180 grados cuando otro periodista la manda a investigar un caso de asesinato, en el que Peter Lyman, un atractivo hijo de un famoso aristócrata rico (Hugh Jackman), es sospechado de ser el tan conocido “asesino del tarot” que mata a mujeres jóvenes.
Así ésta periodista se ve demasiado involucrada con él afectivamente y todo se complica tanto para ella como para el ilusionista que está a su lado todo el tiempo y la cuida como una hija.
La actuación de Woody Allen es muy interesante a pesar de sus años, hace reír muchísimo y se lo ve como un padre maravilloso. Lo que sí, mucho diálogo para su personaje. El interés no tendría que haber estado tan focalizado en él sino en los verdaderos protagonistas.
No la calificaría tanto de divertida, pero sí atractiva. Al ver las primeras imágenes de este film, uno se sorprende frente a algo casi bizarro y excesivamente fantasioso, pero que luego devienen en algo más parecido a la vida real.
Por otro lado, las actuaciones de Jackman y Johansson son brillantes después de verlos juntos en “El gran truco”, la química entre ellos sigue a la vista.
Muchos críticos fueron muy duros con esta producción y piensan que Allen no tendría que intentar siquiera hacer películas cómicas.
A mi gustó y parecer, la película no es muy buena, pero tiene su encanto y sale de lo común. Pero coincido en que Match Point fue mejor lograda que está.
El largometraje no da muchos giros inesperados, pero mantiene atento y bien concentrado al público. Y repito, al principio no gusta tanto, pero después le encontrarán el gustito.

--- SI ---

2 comentarios:

El Bambi dijo...

No me simpatiza Woody Allen (siempre buena onda lo mío). Pero es que he visto algunas películas de él, y leído reportajes a él, y me parece un tipo tan escéptico y desesperanzado, que me deprimen esos guiones tan negativos donde el espectador se tiene que reir de la mediocridad humana (que no es tal, porque la humanidad puede hacer y hace grandes cosas).

Esa idea de que es todo gris, de que nada vale demasiado la pena porque al final siempre terminamos en la misma mediocridad y hay que reírse cínicamente del fracaso colectivo que es la naturaleza humana, no encaja con mis principios. Y por ende, después de algunas películas del prolífico Allen, ya no me dan ganas de verlo porque me parece que me voy a encontrar con más de lo mismo.

Saludos desde la oficina a las nueve de la noche de un viernes (deprimente como Woody Allen, pero con unas caipirinhas en el horizonte de esta noche de abril).

Anónimo dijo...

Los mejores films de Allen son los de la década del '70. Ahí fils como Bananas,Play It Again, Annie Hall, Manhattan y Zelig son claros ejemplos de cómo Woody pasó de la comedia al drama, siempre teniendo en cuenta la frustración de la clase burguesa (similar a lo que hacía Chejov).
Si Allen actúa, siempre hará el papel de intelectual neurótico.

Aún no vi Scoop. La verdad me quedo con la filmografía de Allen de los '70, '80 y '90.


Bye bye.